Diagnòstico
Los queloides y las cicatrices hipertróficas son respuestas hiperproliferativas del tejido conectivo frente a una cicatrización anormal de una herida o traumatismo.
Aparecen en todas las personas y en todos los tipos de piel, aunque si tenemos un familiar cercano que lo ha padecido, o si lo hemos sufrido ya en algún momento, o cuanto más oscuro es el pigmento de la piel, mayor será el riesgo de formación de queloides. Aparecen elevados y sólidos, con una superficie lisa y brillante, inicialmente de color rosa o púrpura, y de color marrón y menos consistente cuando son antiguos.
Las partes del cuerpo mayormente afectadas son los lóbulos de las orejas, el cuello, la parte superior del pecho, la parte superior de la espalda y la región deltoidea.
Las heridas en áreas de tensión son especialmente proclives a la formación de queloides. Diversas alteraciones cutáneas, como el acné, infecciones, quemaduras y perforaciones pueden predecir a la instauración de una cicatrización anormal.
TRATAMIENTOS EN CONSULTA
La buena noticia es que en la actualidad contamos con muchas herramientas de tratamiento no solo curativas sino preventivas.
Dependiendo de las característica de la cicatriz y el momento en que nos consulte, podemos tratarle con infiltraciones intra lesionales de fármacos como corticoides y el 5 fluorouracilo, aplicar crioterapia (frío), luz pulsada intensa, láser vascular, láser fraccionado no ablativo o ablativo.
Cremas
Aunque el cuidado tópico de las cicatrices es muy popular, pocas cremas han demostrado eficacia para mejorar su pronóstico, ni el aloe vera, ni la rosa de mosqueta, ni el aceite de árbol de té, ni aceite de argán han demostrado ninguna eficacia en estudios contrastados.
Los únicos principios activos que reducen significativamente el riesgo de cicatriz hipertrófica y queloide son la silicona y los corticoides potentes.
La presoterapia tampoco ha mostrado eficacia en estudios comparativos para reducir el riesgo de queloides en cicatrices por quemaduras. Ninguna de las cremas cicatrizantes populares que se comercializan cuenta con estudios de rigor científico publicados. Si se sabe que una cicatriz hidratada tiene menor pérdida transepidérmica de agua, esto favorece un mejor pronóstico.